Los regantes de una zona, se conocen entre ellos, si alguien se olvida de alguno de estos pasos otros agricultores más experimentados, le recuerdan la lección, para, al fin y al cabo, evitar conflictos y no perjudicar a otros regantes. La visión de los agricultores es que se riega así, porque no comprenden que se pueda regar de otra manera, porque no tiene porqué quitarte el agua alguien aguas arriba y porque se viene haciendo así desde hace muchos años. Sin duda esta parte cultural y de costumbre, juega un papel crucial en el buen funcionamiento del riego, aunque como mencionan numerosos agricultores la posibilidad de ser sancionado y el maximizar el aprovechamiento del agua son también incentivos para respetar las normas. Desde el punto de vista cultural, el ser sancionado no sólo conlleva una penalización económica, sino que es socialmente considerado como una vergüenza. No en vano, en todas las comunidades hay normas que se tienen que respetar, son lógicas, han sido elaboradas por los propios agricultores y priman el beneficio colectivo y por lo tanto benefician a la mayoría.
Colaboradores | Aviso legal
©2013 Paisatges Culturals a la Reial Séquia de Montcada
© 2013 Fundació Assut